Fútbol Argentino: Cada vez más Liga MX; sin descenso, el presidente de la AFA hincha de un club favorecido y el negocio por delante

Cada vez que hay chance, argentinos y mexicanos se tiran y fuerte en redes sociales, principalmente por un tema futbolístico. Los Sudamericanos presumen ser los mejores y sus títulos recientes los avalan, mientras que los tricolores van con una bandera más político y social, mofándose de la crisis y el resto económico de los pamperos. Lo cierto, es que más allá del odio deportivo y sacando la clara diferencia que hay entre una selección y otra, en las ligas locales, cada vez se parecen más la Liga MX y la LPF.

Si pensamos que en México pasan las cosas más sui géneris del mundo, en Argentina no se quedan atrás. Desde canchas con apenas 2 mil asientos, el presidente de la AFA hincha declarado de un club, un influencer debutando en Primera División o una Liga con 28 equipos en el máximo circuito.

Es cierto que en exportación de jugadores y un mejor sistema de captación de talentos que inicia desde los 7-8 años, hacer que Argentina vaya 2 o 3 pasos adelante de México en el fútbol, llegando a Primera, las cosas ya no son tan diferentes.

Apenas este año, se confirmó que no habrá descenso en la presente temporada, tal y como se juega en México, para que el próximo año la Liga se juegue con 30 equipos.

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Esto se da curiosamente cuando, Barracas Central, el equipo del cual el presidente de la AFA, Chiqui Tapia, es hincha declarado, fue presidente y el estadio lleva su nombre, tenía ya pie y medio en la B.

Pero el tema no es nuevo, desde que Tapia tomó las riendas del fútbol argentino, el cuadro rojiblanco ha estado constantemente en el medio de la polémica por presuntas ayudas y beneficios, ya sea en partidos o en decisiones que terminan dándole una manita.

Barracas estuvo más de 30 años entre la tercera y la cuarta división en Argentina, pero desde que Chiqui llegó al poder, el equipo ha ganado 3 ascensos y se ha quedado en Primera División mucho más tiempo de lo que todos pensaban.

EL NEGOCIO POR DELANTE

Hace unos días, hubo indignación en la prensa y afición de Argentina por el debut en Primera División de SPREEN, el streamer e influencer más famosos de ese país, que, debido a un contrato con la bebida patrocinadora del Deportivo Riestra, tuvo la oportunidad de saltar a la cancha y jugar 1 minuto (no tocó la pelota), en una hecho insólito que puso por delante el marketing antes que el deporte.

Esto generó molestia en los medios de comunicación y en los grandes personajes del balompié que no han dudado en reprocharlo. Nombres como Lionel Scaloni. Rodrigo de Paul, Leandro Paredes, Juan Sebastián Verón, entró varios más, han levantado la voz, tachando esta situación como un papelón.

Y en México ya pasó algo similar, cuando un 3 de abril de 1994, Humberto Filizola, rector de la UAT, debutó a los 44 años jugando con Correcaminos en un partido oficial de la Liga.

INVERSIONES PRIVADAS SE APROXIMAN A LA LIGA ARGENTINA

Por si no era de su conocimiento, los clubes en Argentina no tienen dueños como en México. Allá las instituciones se manejan con socios, cualquier aficionado o persona puede pagar una cuota mensual para mantener de pie a su equipo, además del dinero que les pueda llega de éxitos deportivos, venta de entradas, mercancía oficial y publicidad.

Y aunque este modelo ha estado incautado toda la vida en el futbol pampero, en los últimos años, cada vez más equipos se han declarado en números rojos, lo cual ha llevado el tema al ámbito político.

Hace un par de meses, el presidente Javier Milei, decretó a través de la Inspección General de Justicia, que los clubes de fútbol deberán estar abiertos a las inversiones privadas, no solo para sanar las finanzas de los equipos, sino para abrir el mercado internacional a uno de los principales negocios del país: El fútbol.

Está medida va apoyada por peces gordos del balompié como el Kun Agüero y la Brujita Verón, aunque en la gran mayoría de la población, rechazan la idea de que le quiten poder a los socios.