Chapecoense pierde por default y queda fuera de la Copa Libertadores

Casi seis meses han pasado desde aquel trágico 28 de noviembre. La noche en que el mundo entero conoció al Chapecoense, aunque no fuera por su futbol.

La historia de aquella noche todos la conocemos: El avión que trasladaba al equipo  a Colombia para disputar la final de la Copa Sudamericana frente al Atlético Nacional sufrió un percance, en el cual fallecieron 71 personas, entre ellos 19 futbolistas del conjunto brasileño.

El tiempo pasó y con ello la herida comenzó a sanar, aunque la cicatriz ya estaría ahí por siempre.

Los recuerdos de la tragedia volvieron a aparecer. Tras vencer 2-1 a Lanús en calidad de visitantes en la Fase de Grupos de la Copa Libertadores, los nuevos jugadores del club viajaban nuevamente en un avión, este desde Buenos Aires hasta su ciudad, pero el destino nuevamente tenía otros planes.

Increíble pero cierto, el avión que los trasladaba debió realizar un aterrizaje forzoso en Porto Alegre y de ahí trasladarse en autobús, durante 11 horas y 452 kilómetros, todo por las malas condiciones de la pista de aterrizaje del aeropuerto de Chapeco.

Por si fuera poco, el triunfo obtenido en Argentina no servirá de nada, ya que el Chapeconese alineó indebidamente a Luiz Otávio, quien incluso anotó el gol del triunfo y aún no terminaba de cumplir una suspensión de tres partidos, por lo que Lanús recibió los tres puntos apenas en las últimas horas, ya con los partidos de la última jornada encima, determinación que de paso deja a los brasileños eliminados de la competencia.

Aunque el escenario no podría parecer más oscuro, en Chapeco la ilusión de salir adelante sigue vigente. No se trata de cuantas veces caigas, sino de cuántas logres levantarte.